lunes, 28 de mayo de 2018

PATY REYES…LA REPARACIÓN DEL DAÑO


PATY REYES…LA REPARACIÓN DEL DAÑO
Colaboración para Global Media
28 DE MAYO DEL 2018.

En unos meses la familia de Paty Reyes tendrá ya tres años de espera en el Registro Estatal de Atención a Víctimas de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas (CEEAVSLP) luego de que Paty sufriera la negligencia en la atención dentro del Anexo para mujeres del Centro Preventivo y de Reinserción Social de San Luis Potosí, al haberle negado el ejercicio pleno de sus derechos humanos, como es el derecho a la salud y el derecho a la vida.

A Paty le fue detectado en el IMSS desde el 2008, antes de ser detenida por el delito de homicidio, el padecimiento de síndrome ansioso agudo; ya en reclusión el psiquiatra adscrito al penal detecta depresión crónica y post parto, intento suicida secundario a impulsividad, con depresión, vacío interior, desesperanza y distorsión cognoscitiva. Estos trastornos con un deficiente seguimiento y tratamiento clínico, provoca que Paty en por lo menos cuatro ocasiones intentara quitarse la vida, el 15 de agosto de 2014 fue encontrada sin vida en su celda.

La línea entre ser víctima de un delito, como lo es violencia familiar, es muy delgada para que pueda traspasarla y convertirse en victimaria. Los actos de violencia que puede vivir una mujer en la relación de pareja puede llevarla a trastornos severos emocionales que pueden desencadenar una afección psiquiátrica, Paty no denunció los hechos violentos que vivió con su pareja, en cambio sí inició un tratamiento médico para mejorar su estado de salud.

Dentro del Penal de La Pila recibió de manera precaria la atención especializada necesaria para su situación de salud, sí hubo varios recordatorios del personal psicológico y médico-psiquiátrico que era indispensable un apoyo especial, y de todo ello quedaron asentados en notas informativas que se anexaron a la recomendación 20/2015 que emitió la Comisión Estatal de Derechos Humanos  el 07 de julio de 2015.

El Anexo Femenil en el penal de La Pila no tiene un área especializada para la atención de pacientes que como Paty han atravesado la línea de victimas a victimarias por graves problemas psiquiatricos, conviven con internas que no están sensibilizadas a este tipo de padecimientos y dentro de sus expresiones pueden lastimarlas, y acentuar sus situaciones de crisis, que como en el caso de Paty venía presentado desde tiempo atrás, pero que además se corroboró que el personal de custodia incumplió sus funciones para un adecuado manejo de las crisis que presentaba.

La Recomendación que emitió en su momento la CEDH se limitó a cinco numerales, el primero con un “A quien corresponda” solicita se haga la reparación del daño en favor de sus familiares, sin que hasta el momento la familia de Paty haya sido informada de este punto recomendado, ni siquiera de los trámites que deben seguir para formular adecuadamente el proceso a que tienen derecho.

En el segundo numeral también “A quien corresponda” se le señala que realice las gestiones para contratar personal psiquiátrico que garantice la atención especializada, sin ir más allá y considerar las Reglas de Bangkok que emitió Naciones Unidas para el tratamiento de las reclusas y medidas no privativas de la libertad para las mujeres delincuentes, que advierte:

Regla 16
La elaboración y aplicación de estrategias, en consulta con los servicios de atención de salud mental y de asistencia social, para prevenir el suicidio y las lesiones autoinfligidas entre las reclusas, y la prestación de apoyo adecuado, especializado y centrado en sus necesidades a las mujeres en situación de riesgo deberán formar parte de una política amplia de atención de salud mental en los centros de reclusión para mujeres. (Reglas de Bangkok, 16 de marzo de 2011)[1]

Es decir dentro de las Recomendaciones la CEDH  debió exigir a la autoridad que tuviera las condiciones adecuadas para atender a las mujeres privadas de su libertad con trastornos psiquiátricos o bien  sujetarse al numeral 12 de dicho documento de la ONU en el que se menciona que las mujeres con padecimientos mentales podrán tener la atención de salud fuera de la prisión.

Es importante identificar si ha cumplido el Anexo de la Pila en cuanto a la recomendación Tercera y Quinta relativa al procedimiento administrativo en contra de los servidores públicos que actuaron con negligencia u omisión sobre estos.

Y además verificar el seguimiento que le ha dado la CEEAVSLP con respecto del registro de víctimas que tiene Paty que es REGEV-088/2015, que una vez que está inscrita, tienen sus familiares derecho de acceder a la Reparación Integral, que consiste en la Restitución, la Rehabilitación, la Compensación, las medidas de Satisfacción y la No Repetición.




[1] Al respecto veáse https://www.unodc.org/documents/justice-and-prison-reform/Bangkok_Rules_ESP_24032015.pdf

lunes, 21 de mayo de 2018

¿HACIA DÓNDE? DEFENDER LA VIDA


¿HACIA DÓNDE? DEFENDER LA VIDA
Colaboración para Global Media
21 DE MAYO DEL 2018.

En la tercera semana de este mes se registró un caso de una jovencita que fue  víctima de feminicidio.  Esther estudiaba bachillerato en el Cecyte de Ebano, justo enfrente de su casa ocurrieron los hechos en los que su novio le quitó la vida y luego se intentó suicidar. Dos jovencitos, ella de 17 años y el de 19. ¿Qué está pasando con las personas jóvenes? ¿Cómo están construyendo sus relaciones afectivas? ¿Las personas adultas cómo estamos influyendo para la interacción diaria que tienen?

Este fin de semana estuvimos dialogando con un grupo de profesores de bachillerato que toman un diplomado y me invitaron a hablar del Feminicidio como patología social, y resulta muy loable que  los profesores estén interesados en saber cómo apoyar a las personas jóvenes a construir sus relaciones sociales y afectivas desde el espacio de la escuela, que es una de estructuras en donde se van forjando las relaciones humanas, pero que también es un termómetro de lo que está pasando en otras esferas como son el hogar y la comunidad.

La tasa de abandono en bachillerato es considerable [1]  datos de la Subsecretaria de Educación Media Superior de la Secretaria de Educación Pública señalan que se logró reducir a un 13.3 por ciento en todo el país. Los datos del Sistema Educativo Nacional [2]estiman que estuvieron inscritos más de 3 millones 300 mil jóvenes, hombres y mujeres.  Pero las cifras son delicadas cuando observamos que de cada 100 habitantes en San Luis Potosí de 15 años y más solo 19.7 terminaron el bachillerato.

Las personas jóvenes deben prepararse académicamente para que puedan tener mejores perspectivas de trabajo pero sobretodo que les permita observar con detenimiento la realidad que se vive en su contexto. Es claro, y reiteradamente hemos insistido que la educación es clave para tomar decisiones que estén basadas en argumentos reales.

La violencia que se está dando entre jóvenes adolescentes de educación secundaria y media superior nos debe llevar a  realizar acciones de orientación sobre las consecuencias de la violencia, sin embargo muchos de los adolescentes que tienen conductas y actitudes violentas son derivadas de hechos que les han ocurrido y que seguramente en sus hogares se ha omitido buscar apoyo para remediar las situaciones. Pero porque además debemos agregar que los contextos económico y cultural de muchas familias es precario, por  lo que el espacio educativo se ha convertido en la educadora de nuestros hijos e hijas.

Debemos garantizarles a las personas jóvenes que en cuanto se detecte alguna situación de conflicto en los espacios que nos corresponde atender a los adultos, les busquemos el apoyo y se logre un dialogo con padres y madres. Muchos jóvenes se considera que ya pueden tomar decisiones  antes de los 15 años y nos encontramos con adolescentes que aún no completan su actividad cognitiva, que ya están enfrentando un embarazo no deseado que les lleva a tener que conseguir trabajo seguramente muy mal remunerado y por consiguiente se genera la deserción escolar. En otros escenarios se ven obligados a trabajar de tiempo completo o medio tiempo para aportar  recursos para la economía del hogar.




[1] http://www.sems.gob.mx/es_mx/sems/Se_incremento_hasta_82_por_ciento_la_cobertura_del_nivel_medio_superior
[2] Al respecto ver información en http://www.sems.gob.mx/work/models/sems/Resource/11579/1/images/principales_cifras_2012_2013_bolsillo.pdf

lunes, 14 de mayo de 2018

LA PAZ Y EL DERECHO HUMANO AL DESARROLLO


LA PAZ Y EL DERECHO HUMANO AL DESARROLLO
Colaboración para Global Media
14 DE MAYO DEL 2018.

En los años recientes el tema de la violencia se convirtió en un tema recurrente, pasamos en poco, de relatar historias que le habían pasado a las otras personas y  en ciudades lejanas, a que le ocurrieran a personas que están en nuestro entorno, y más aún,  ahora los otros somos todos.

Nos enteramos de lo que sucede a través de medios de comunicación y redes sociales que se han convertido sin ningún recato en el termómetro de los hechos violentos que ocurren.

Los medios de comunicación a través del periodismo nos informan de situaciones de conflicto que nos causan emociones dirigidas al temor, a la impotencia, al dolor, a la rabia, al descontento, a la tristeza. Hay medios que se centraron en sólo publicar hechos que habían ocurrido y que eran capaces de ser verificables. Hay otros medios que el punto de quiebre es mostrar el dolor, la muerte y la desesperación de víctimas y probables culpables.

Vivimos en medio de la zozobra, y vemos cada día que el concepto de PAZ se diluye en nuestro discurso, ni siquiera usamos el término aunque flote en el ambiente como antónimo del de violencia. Utilizamos muy poco la palabra aunque deseamos que podamos vivir en ella. ¿A qué se debe que vamos dejando fuera de nuestro discurso ciertas palabras? A que no las empleamos, a que no las leemos, a que no las escuchamos.

Tenemos derecho a la Paz como parte de nuestros derechos humanos, además derecho a que vivimos con tranquilidad y armonía.  Las palabras no se las lleva el viento, por eso es necesario darles sentido en el marco de los derechos a los que tenemos todas las personas. Buscar la Paz no son sólo una forma de verbalizar sino un deseo que debe materializarse con una convivencia en la que las diferencias que tenemos entre las personas nos ayuden a aumentar la capacidad de respetar a los demás.

El próximo 16 de mayo vamos a conmemorar el Día Internacional de la Convivencia en Paz [1] y que instaura la Organización de Naciones Unidas, y que nos debe recordar qué hacemos para alcanzar una convivencia armónica, cómo vemos a las demás personas, cómo promovemos el dialogo , la solución de problemas o conflictos a partir salidas alternas, de entender la postura del otro, de la cooperación.

Esta conmemoración es un día que armoniza muchos acuerdos internacionales que se han tomado por los países que forman parte de la ONU, y lo he tomado como punto de referencia para reflexionar justo a casi la mitad del año, de lo que estamos construyendo como referente de tranquilidad en nuestro entorno inmediato, en nuestra familia, en nuestra calle.

Hemos avanzado en muchos temas, en derechos de igualdad entre las personas y no discriminación, en derechos humanos de las mujeres, en derechos del medio ambiente, en derechos  a la educación y cultura,  en respeto a la religión e ideas, que todos juntos nos deberían garantizar la tranquilidad de vivir en un entorno saludable y libre de prejuicios que luego puedan llevar a actos de violencia.

Nos estamos acostumbrando a la violencia como parte de la rutina de diario, y es casi como hacernos inmunes al dolor que genera, y a erradicar la Paz de nuestro lenguaje. Es algo que debemos replantearnos, no sólo porque habrá elecciones que nos dan la sensación de que podemos volver a empezar, a reconstruir lo que nos sentimos se nos está perdiendo, sino porque estamos con situaciones de estrés que nos hacen dudar de las decisiones que tomamos, porque nos hemos vuelto desconfiados en medio de una vorágine de hechos en los que la paz es la gran ausente.

Vamos a alcanzar un desarrollo pleno como personas, como país  a partir de que nos podamos sentir seguros de nuestro entorno, de nuestra vivienda, de nuestro trabajo. La sensación que nos trae la paz en estos contextos nos hace crecer y desarrollarnos, eso buscamos todas las personas.


[1] http://www.un.org/es/events/livinginpeace/