martes, 20 de septiembre de 2016

DELITOS Y DIAS FESTIVOS

DELITOS Y DIAS FESTIVOS
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
19 SEPTIEMBRE DEL 2016.

Los periodos de asueto son un descanso entre las fechas de las rutinas cotidianas absorbentes, es un momento para descansar de los altibajos que trae consigo la vida diaria. Sin embargo se han convertido en momentos de dolor y desconsuelo para muchas familias al vivir hechos delictivos y accidentes imprudenciales que trastocan y cambian las vidas de las personas involucradas.

Los accidentes automovilísticos son la primera causa de muerte, registrándose un total de 436 mil cada año, de acuerdo con datos del INEGI, y las cifras aumentan en los periodos  vacacionales y días festivos. ¿Qué es lo que ocurre? ¿Dónde está el origen de la situación? Somos una sociedad con largas jornadas de trabajo y en la mayoría de las ocasiones con más de un empleo, lo que trae consigo la necesidad de aprovechar el descanso de días “feriados”.

En lo que se refiere a la entidad potosina seis de cada diez accidentes fatales se registran en los municipios de San Luis Potosí, Soledad de Graciano Sánchez, Ciudad Valles, Rioverde, Matehuala, Tamazunchale[1] . Las personas más afectadas de manera letal son ocupantes y peatones en grupos de edades de entre 10 a 19 años y de 20 a 39 años. Tenemos una tasa de letalidad de accidentes de 9 accidentes por cada mil. 

La situación para las víctimas se convierte en una situación delicada sobre todo cuando más que un accidente se trata de un hecho en el que se configura un delito por el cual se puso en riesgo la vida de las personas que ocupan el vehículo. Es muy importante la prevención durante los periodos vacacionales o de días festivos.

De acuerdo con el perfil estatal de accidentes elaborado por el Consejo Nacional para la prevención de Accidentes (CONAPRA) los accidentes viales se registran con mayor incidencia en las zonas urbanas  y suburbanas, más que en carretera, con una tasa de morbilidad de 28.3 para hombres por cada 100 mil habitantes, mientras que la tasa de mortalidad  es de un 87 porciento, esto quiere decir que de cada 10 accidentes que ocurren en 8 hay personas ocupantes o vinculadas al accidente que pierden la vida.

Cuando hablamos de datos estadísticos nos parecen fríos y nos queda sí una visión clara de lo que está ocurriendo y que luego se publica en la prensa cada día, pero sobre todo cada vez que tenemos fines de semana largos o días festivos en los que generalmente asociamos al alcohol o las desveladas hechos lamentables, sin embargo no nos dimensiona lo que le ocurre a las víctimas indirectas de estos hechos letales.

Las personas víctimas pierden la vida de su familiar y además tienen secuelas físicas y emocionales de los daños, las cifras no retratan el dolor que les embarga por estos hechos, ni se acerca a observar la reparación de los daños. Para la atención a víctimas es muy importante darles certeza a las personas sobre el apoyo que puede recibir cuando se trata de un delito y los derechos que le asisten para la ayuda de emergencia, asistencia y reparación del daño.

El estado tiene la responsabilidad, mediante la prevención de sensibilizar a las personas de las consecuencias de los accidentes viales, para evitar que ocurran hechos graves.





[1] http://www.conapra.salud.gob.mx/Interior/Documentos/Observatorio/Perfiles/24_Sn_Luis.pdf

martes, 13 de septiembre de 2016

LAS RAZONES DE LAS PROTESTAS

LAS RAZONES DE LAS PROTESTAS
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
12 SEPTIEMBRE DEL 2016.

Nuestro país es uno de los países en América Latina que muchos grupos de población han levantado la voz y han tomado las calles para ser atendidos por el Estado en sus reclamos relacionados con la observancia de sus derechos, los movimientos se dieron desde la disidencia del gobierno, precisamente para pedir y exigir que se atendieran las peticiones que por ley corresponden.

Salir a las calles y protestar para exigir derechos tiene que ver con el descontento de grupos ante el incumplimiento de acuerdos, de leyes, de respeto a las garantías, por sentirse que tienen menos derechos, por ser excluidos, etc. La protesta social se ha convertido en un ejercicio continuo en países y en ciudades como el nuestro, donde muchas veces atrás de los grupos hay intereses políticos de por medio.

¿Qué pasa con las demandas sociales que tienen que ver con la creencia de que ante los cambios se están perdiendo derechos? La protesta sirve para exigirle a la autoridad que cumpla con la responsabilidad que tiene frente a temas económicos, sociales, culturales, y de derechos humanos. La protesta para “quitarle” derechos a las personas confrontan en el terreno del espacio tanto real como virtual, en redes sociales, a las personas.

Estamos en el marco de un contexto de progresividad de los derechos de las personas, lo que ha ocasionado el temor de grupos conservadores que consideran que el avance de derechos en temas vinculados a la integración de las familias, los derechos de la comunidad LGBTTTI, el matrimonio igualitario, la adopción de hijos de padres del mismo sexo, el cambio de identidad, les ocasiona un deterioro al desarrollo que tradicionalmente han tenido, y que causó zozobra. Estos grupos están tomando las calles para también dar su postura sobre estos temas.

Todas las personas tenemos los mismo derechos, por tanto todos estamos en la misma posibilidad de salir a las calles y protestar contra aquello que consideramos vulnera nuestros derechos siempre y cuando la exigencia no sea en contra del avance de los derechos de las personas.

De acuerdo con las ciencias sociales se localiza el concepto de Privación Relativa, que se refiere a cuando un grupo social dice estar viviendo privación de bienes o de estados de vida que no existen realmente, [1] y que muchas veces se recurre a los medios de comunicación  para dar a conocer posturas que les desahoga de las  frustraciones de las personas.

Por tanto la Privación Relativa es la experiencia de privar de algo al cual se cree que uno tiene derecho. Es la sensación de la gente descontenta que comparan sus posiciones con otros y señalan que tienen menos de lo que creen que se tiene derecho.

Los científicos sociales, analistas particularmente políticos y sociólogos, han citado 'la privación relativa' como una causa potencial de movimientos sociales y desviación, que conduce en situaciones extremas a la violencia política como amotinamiento, terrorismo, guerras civiles y otros casos de la desviación social como el delito”. [2] Es decir tiene que ver con la comparación con normas sociales que no son absolutas,  que pueden ser temporales y que están asociadas a la percepción de cada uno de los grupos sobre los derechos que tienen la personas.

Es muy importante que las protestas sociales en las calles tengan causas en materia de progresividad de los derechos humanos. Salir y protestar por las acciones inadecuadas del Estado ha sido clave para los cambios en muchas naciones, como la nuestra, ha sido de gran utilidad en la tutela de los derechos de las personas, teniendo como referente los movimientos de izquierda y alternativos



[1] Al respecto véase Las protestas sociales en Latinoamérica como herramienta política de los grupos de poder, en  http://blog.sabf.org.ar/2012/07/05/las-protestas-sociales-en-latinoamerica-como-herramienta-politica-de-los-grupos-de-poder/
[2] Privación Relativa en http://www1.helpes.eu/01102975/PrivacionRelativa

martes, 6 de septiembre de 2016

DESIGUALDAD ECONÓMICA Y VIOLENCIA

DESIGUALDAD ECONÓMICA Y VIOLENCIA
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
05 SEPTIEMBRE DEL 2016.

El desarrollo de los países es diverso, desequilibrado y con una tendencia a incrementar la brecha de desigualdad. Este desarrollo ha generado el incremento en la pobreza de las personas y de los países. Sin embargo para saber en qué medida somos más pobres que antes hay muchas formas de tratar de averiguarlo. Para ello el banco Mundial desde 1990[1] en  trató de hacer una aproximación a lo que es la pobreza, basada siempre en el ingreso de las personas y su gasto en el consumo.

A la pobreza le han cambiado de nombre para tratar de modificar el impacto que tiene en todos los ámbitos de la vida de las personas, las personas pobres ahora son de bajos ingresos, y los países son desfavorecidos. Sin embargo, lo que queremos revisar y poner en la mente es que cada día se tienen condiciones que no favorecen un equilibrado desarrollo de todos y todas.

Los estudios sobre el tema han advertido que se tratan de hechos complejos multifactoriales.[2] Que nosotros los vemos todos los días en la manera de organizar nuestro gasto, satisfacer nuestras necesidades que van aparejadas al conocimiento, al desarrollo, hemos observado que la propia sociedad nos va dando pautas de consumo y que ahora mismo tiene que ver con un consumo cultural que no es accesible para todas las personas.

Las desigualdades en lo económico, tienen secuelas en lo individual y en lo colectivo. Ahora mismo en China se reúne el Grupo de los G20, Cumbre en el que los países más desarrollados analizan los problemas que tenemos y tratan de dar soluciones y establecer tiempos para que los países miembros de la Organización de Nacionales Unidas den los tiempos para sus cumplimientos. Es ahí en la que observamos la principal desigualdad, hay naciones que están ya velando por el interés colectivo de un medio ambiente saludable, mientras otro de los temas claves ha sido la guerra en Siria, las personas desplazadas, el crimen, la trata de personas, etcétera.

Estas desigualdades se han producido por los regímenes políticos de cada región del mundo. En la que el factor económico ha marcado todas las pautas para que las personas no puedan tener los satisfactores que le brinden la felicidad que se busca.

La carencia de un empleo digno que les permita a las personas poder desarrollarse en un mundo cada vez más interconectado, le genera una percepción de insatisfacción que le impide un sano crecimiento. De acuerdo con Sander Briocado [3]  a medida que las necesidades básicas no están satisfechas o no ven un beneficio directo, se produce una ausencia de motivación, que tiene como consecuencia evadir situaciones difíciles, abandonar metas y objetivos importantes en sus vidas.

Esta sensación que muchas personas tienen por la carencia de un ingreso adecuado, les lleva a la agresión, a buscar la manera de tener bienes a costa de recurrir a la violencia para obtenerlos. Los estudios que hay sobre la relación entre pobreza y violencia no son determinantes, lo que sí han observado los expertos, es el vínculo entre la frustración de las personas que se sienten desmotivadas para retomar sus metas y las acciones que luego llevan a cabo para obtener recursos.

La representación de las carencias económicas esta en las zonas urbanas y rurales. La migración es una de ella y que conlleva muchas acciones que lesionan la dignidad de las personas, porque se ha convertido en muchos casos en nuevas formas de esclavitud y maltrato. La deserción escolar por falta de dinero para continuar los estudios nos arrojan una sociedad que está dejando de prepararse para el futuro, y que podrá repercutir en personas con escasa preparación académica y cultural para hacerle frente a los retos de gobernarse y regirse.

Los delitos relacionados con la pobreza nos deben hacernos detener un poco pa repensar lo que hace cada uno de nosotros en el ámbito de sus competencias, revisar las acciones de gobierno, las políticas públicas que se llevan a cabo para incrementar el bienestar de las personas.

Poner el tema en la mente de las personas es importante para analizarlo y hablar de las consecuencias, quizá sin tener una respuesta para resolver muchas de las dificultades, pero si revisar lo que pasa en nuestras emociones y precepciones de la realidad a partir de los fenómenos económico que se dan, identificar que sí hay una sensación de vacío producido por la carencia de bienes que nos permitan estar en el mismo nivel que el resto de las personas.



[1] Cita en Violencia y pobreza una relación estrecha, JOSE M. TORTOSA en Papeles nº 50; 1994, pp. 31-38
[2] Rodríguez, Francisco, La pobreza como un proceso de violencia estructuralRevista de Ciencias Sociales (Ve) [en linea] 2004, X (enero-abril) : [Fecha de consulta: 5 de septiembre de 2016] Disponible en:<http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=28010104> ISSN 1315-9518 
[3] La Pobreza como un probable factor que induce a la violencia, un punto de vista psicosocial, Sander Brocado, Betty en http://148.206.107.15/biblioteca_digital/capitulos/418-5673eku.pdf