martes, 23 de febrero de 2016

MUNDOS POSIBLES DEL FEMINICIDIO

MUNDOS POSIBLES DEL FEMINICIDIO
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
23 DE FEBRERO DEL 2016

Al leer un relato periodístico sobre los aparentes acontecimientos de un suceso nos permiten construir el hecho, nos da la posibilidad de imaginar la serie de emociones y sentimientos que están en los personajes involucrados, nos permite imaginar los problemas previos, el conflicto.

En la prensa se puede leer algo que ocurrió, y que aparentemente está apegado a la verdad, a la comprobación, pero nos damos cuenta que los textos periodísticos son sólo verosímiles, en el que muy probablemente esta la construcción de un mundo posible[1], que no refleja lo que el personaje del relato pudo haber vivido. Nos construyen una imagen basada en los estereotipos y en el propio referente social en que vivimos, para poder comprender la historia, y seguramente ponernos como jueces de ese personaje involucrado.

El relato de la muerte de una mujer por ejemplo, ha ido evolucionando, por lo menos se ha ajustado a la privacidad de su identidad, sin embargo se dan datos sensibles que llevan a que la persona pueda ser identificada por las personas cercanas a su contexto. La muerte de una mujer la han señalado casi siempre como si apareciera de la nada un cuerpo sin vida y ésta hubiera dejado de existir sin más ni más.

“Se encontró cuerpo sin vida” y luego hacen la descripción de un hecho que a su vez le fue contado por otra persona que seguramente fue quién “encontró” o vio el cadáver. Se toman los datos del parte informativo policíaco para hacerle a lectores un escenario probable de lo ocurrido. Esto lo vemos todos los días en la construcción de un texto periodístico. Cuando se trata de quien “pierde la vida” es una mujer la construcción se hace en referentes imaginarios del deber ser de la mujer, de esa perspectiva patriarcal de querer observar a las mujeres como el sexo débil o la relación semántica de mujer-madre-abnegada-buena. Y si “aparece muerta” se lanza el texto a indagar una razón subjetiva vinculada con la condición de oposición de la mujer-buena-abnegada.

El filósofo francés Michel Maffesoli (2007) menciona en su libro  El Crisol de las Apariencias [2]   cómo se genera una aparente forma de solidaridad social que se elabora a partir de atracciones, repulsiones, emociones y pasiones,  que se materializan en una palabra o que rescatan un acto de habla de las personas que le contaron al periodista cómo cree que pasaron los hechos, de esta manera se va formando y fortaleciendo un mundo posible de las mujeres víctimas de feminicidio.

La responsabilidad no recae en el o la periodista, sino que son una serie de elementos tomados del contexto en el que se generan los hechos los que se ven reflejados en el texto periodístico.

Los feminicidios en la prensa no han puesto como víctima a la mujer, han dejado abierta la posibilidad para que los lectores y lectoras imaginen un probable conflicto y sólo alcanzan a rescatar la declaración de quien estuvo en los hechos, que pudo haber sido el inculpado, si es que se logra capturar al responsable antes de que se dé la información.  Como ejemplos están los casos:

El ocurrido en septiembre del 2014 en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez [3],  Anayeli fue asesinada por su cuñado quien aparentó un suicidio para evitar que se le inculpara  
El otro ejemplo es el feminicidio de Blanca el 26 de diciembre del 2015, fue asesinada a golpes por su cuñado.

En estos ejemplos independientemente del medio en el que se publicó la información, se dio prioridad al relato que dio el inculpado, de este modo justificó el hecho, y se le dio entrada a aspectos que son de orden ético como dice Maffesoli, que tienen razón de ser en un territorio , en una comunidad, y “justifica” el feminicidio. El inculpado para evitar perder el poder que le impulsó a cometer el asesinato y en un afán de supervivencia de su credibilidad, construye los motivos por los que cometió el delito, permitiendo que el lector o lectora llegue a justificar el hecho, reconociéndose en él a sí mismo.

La construcción de personajes en la prensa en un proceso muy complejo, pero el dibujo de personajes cotidianos que cometen delitos es tarea de todos los días, que no sólo es escribir el acontecimiento, es va más allá de lo  implícito de una carga emotiva, moral, ética, contextual, etc, que va en detrimento de la víctima, a quién la tenemos olvidada en los relatos de la nota roja, aparece en el conflicto, cuando se conoce el hecho,  se le describe con los primeros elementos del parte policíaco, pero no se le reivindica, ni se regresa a contar la historia para decirnos cómo era, cómo sentía, qué problemas enfrentaba, el sufrimiento de su historia de vida. La pone en desventaja y al mismo tiempo ese relato parcial, revigoriza un contexto de lectores ávidos de justificar el machismo y la misoginia.




[1] Véase DOLEZEL, Lubomir, en Teorías de la Ficción literaria, editorial ArcoLibros SL, Madrid, 1997
[2] MAFFESOLI, Michel, En el Crisol de las apariencias , México, Editorial Siglo XXI, 2007. Pag.236
[3] http://elheraldoslp.com.mx/2014/09/19/mujer-asesinada-por-su-cunado-no-se-dejo-violar/

martes, 16 de febrero de 2016

EL DINERO Y LAS RELACIONES DE PAREJA

EL DINERO Y LA RELACIONES DE PAREJA
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
15 DE FEBRERO DEL 2016

El amor es uno de los temas más mencionados en las conversaciones cotidianas, está en la esfera de lo privado, de aquello que sentimos, que nos hace felices, o … infelices, todo esto parece que sólo se maneja en lo subjetivo, hemos como sociedad construido que el estado ideal de los seres humanos es vivir enamorados y enamoradas.

La felicidad representa el gran reto de todas las personas, vivimos para serlo a lo largo de nuestra vida. En las relaciones de pareja esta felicidad siempre esta cimentada sobre el poder, el sexo y el dinero. El dinero representa poder, quien lo tiene cuenta con el dominio suficiente sobre otras personas, sobre su pareja.

¿Qué pasa cuando los recursos no son suficientes? Las dificultades y problemas que presentan las parejas la mayoría de las ocasiones está relacionada con el dinero, quien lo tiene siempre está en ventaja, pues logra tener el control, mientras que con la ausencia de dinero provoca que la pareja tenga que sujetarse a las reglas que le marca.

La mayoría de los conflictos de una pareja es por problemas con el dinero[1] , en nuestro país contar con un empleo no es suficiente para alcanzar un bienestar óptimo de vida, pues los sueldos son de los más bajos en América Latina y se requiere de buscar fuentes alternativas adicionales de conseguir ingresos, lo que implica una jornada de trabajo de más horas que signifique disminuir el tiempo que se puede pasar con la familia. Los gastos compartidos de una pareja para la manutención del hogar no son siempre equitativos y eso genera una buena parte de los conflictos.


De acuerdo con datos del INEGI, de cada 100 mujeres de un rango de edades entre los 15 y los 49 años, 58 están unidas[2] , ya sea casadas o en unión libre, 33 son solteras 9 están separadas, divorciadas o viudas[3]  , y la mayoría de ellas ha atravesado por una etapa de dificultades a consecuencia de no contar con los recursos suficientes para el sostenimiento de la familia, o bien porque es necesario dedicarle más horas a la jornada laboral en detrimento de la relación con la familia y en particular con la pareja.

Quienes se ven más desprotegidas a la hora de conseguir un empleo siguen siendo las mujeres, toda vez que se considera que muchas de ellas sólo trabajan para completar los gastos de la familia, cuando de acuerdo con datos del INEGI de cada 10 mujeres 4 son cabeza de familia.

La desocupación afecta más a las mujeres “ El incremento de la desocupación afecta más a las mujeres y a los jóvenes. La información al tercer trimestre de 2015 indica que la tasa de desocupación de las mujeres ha crecido de 7,7% a 8,2%. (…)” [4]  A ello le tenemos que agregar que la calidad del empleo no es óptimo, y no siempre se cuentan con todas las prestaciones que exige la Ley del Trabajo. Lo que en muchas de las ocasiones las mujeres prefieren dedicarse a alguna actividad por su cuenta propia. 

Los problemas de la pareja están estrechamente vinculados al dinero, las mujeres son las que llevan la carga más pesada pues además de hacer más aportaciones a los gastos de la familia, tiene que hacer creer a su comunidad que quien lleva más recursos a la casa es el hombre, por la carga cultural que implica todavía que el hombre sea el proveedor del hogar.

Advertimos que una de las necesidades que tienen las mujeres para poder tomar decisiones es que deben ser independientes económicamente, como cita Marcela Lagarde en su texto Claves Feministas para la Negociación en el Amor [5]   para estar en condiciones de establecer acuerdos con la pareja en la que se puedan tomar decisiones conjuntas, que les beneficien a ambos, se deben estar en las mismas condiciones económicas.

La desigualdad en el poder adquisitivo de hombres y mujeres, así como la desventaja social que tenemos al abandonar estudios, trabajo, etc.  por dedicarse la mujer al cuidado de la familia ha tenido un impacto en los sueldos que siguen siendo menores incluso en el mismo rango de responsabilidades.

Es difícil alcanzar la felicidad cuando no se cuentan con los recursos económicos suficientes en el hogar para su sostenimiento. Mientras las mujeres estén en una situación de desigualdad no podrán sobrellevar los conflictos emocionales que están relacionados con el aspecto financiero.



[1] Véase el artículo http://economia.elpais.com/economia/2015/09/05/actualidad/1441461835_564364.html
[2] http://www3.inegi.org.mx/sistemas/saladeprensa/noticia.aspx?id=2429
[3] http://www.inegi.org.mx/est/contenidos/proyectos/encuestas/hogares/especiales/enadid/enadid2014/doc/resultados_enadid14.pdf
[4] http://www.ilo.org/americas/sala-de-prensa/WCMS_435175/lang--es/index.htm
[5] http://cdd.emakumeak.org/ficheros/0000/0538/claves-feministas.pdf

lunes, 15 de febrero de 2016

POBREZA Y MUJERES

POBREZA Y MUJERES
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
09 DE FEBRERO DEL 2016

Las familias se han transformado, hay una nueva construcción de familias que  están alejadas de la idea patriarcal y tradicional. Muchas han tenido que asumir el sostenimiento completo de un hogar, han tenido que abandonar proyectos de estudio para trabajar y sacar a sus hijos e hijas. De pronto eso nos hace ver las carencias por las que atraviesan muchas mujeres todos los días, desde contar con el dinero suficiente para comprar lo indispensable para los alimentos, transporte, salud, educación, etc.

Las mujeres tenemos una desventaja histórica para la posesión de bienes, que sería uno de los principales indicadores para saber si una persona tiene o no recursos económicos. Otro es el nivel de educación, hasta qué grado de escolaridad llegó una mujer antes de tener participación activa en el sector productivo.

Hemos incursionado en el campo laboral desde hace varias décadas y cada día somos más las mujeres trabajando, de los 53.1 millones de personas que trabajamos en México[1], poco más de 32 millones son hombres y más 20 millones somos mujeres. Las mujeres han alcanzado una escolaridad de 10 años antes de tener su primer empleo, por lo que han concluido estudios de primaria y secundaria, lo que no les hace ganar más, y si tener que enfrentar la responsabilidad de sostener un hogar de manera total, pues muchas de las mujeres económicamente activas no tienen pareja.

Los datos de 2012 señalaban que de cada 10 hogares 4 tienen como cabeza de familia a la mujer, que por lo general tiene a los hijos y las viviendo con ella, lo que sin duda aumenta la responsabilidad económica para el sostenimiento integro de cada miembro de la familia. [2] Además de acuerdo a “Hombres y mujeres en México 2013” del INEGI, se advierte que en la mayoría de los hogares sostenidos por mujeres sólo se cuenta con el ingreso de ella, no hay ninguna otra aportación económica, mientras que en el caso de que los hombres son cabeza de familia es con la esposa, o la pareja con la que comparten los gastos.

La pobreza de las mujeres o feminización de la pobreza alcanza una escala mayor al momento en el que pretenden adquirir una vivienda , pues tiene mayores dificultades para acceder a un crédito hipotecario, hasta hace muy poco debían estar casadas, por lo que comprar una casa era complicado y mejor recurrían a rentar lo que implicaba que una buena parte de sus ingresos se fuera en ese rubro. Generalmente cuando se adquiere una vivienda por parte de una pareja, se queda a nombre del hombre, en el 90 por ciento de los casos de hogares sostenidos por el hombre las viviendas está a su nombre. A las mujeres les cuesta más esfuerzo adquirir su vivienda propia, apenas un 10 por ciento la adquiere a través de un crédito del INFONAVIT , FOVISSSTE O FONAPO.

Para muchas mujeres que sostienen un hogar, la idea o proyecto de seguir estudiando queda fuera de su alcance.  En los niveles de educación básica los porcentajes de niños y de niñas inscritas y que concluyen es muy similar, incluso en el nivel de bachillerato hay más mujeres inscritas que hombres. Hasta los 14 años las niñas asisten a clases más que los hombres, pero en el rango de 15 a 17 años, las mujeres dejan de asistir,  en muchos de los casos por embarazos a edad temprana. A nivel superior las mujeres también tienen mayor presencia en la matricula, pero al finalizar la carrera son los hombres los que la concluyen.[3]

Generalmente este fenómeno obedece            a que son las mujeres las que adquieren la responsabilidad del cuidado del hogar, hijos e hijas al formar una familia. Sin embargo no logran concluir los estudios y pueden sólo emplearse de manera parcial. 

A nivel de estudios de posgrado, son las mujeres las que menos concluyen una maestría o un doctorado. El Sistema Nacional de Investigadores por ejemplo de cada 100 miembros sólo 30 son mujeres.

Los niveles de pobreza por supuesto los vemos todos los días cuando una mujer se enfrenta a muchas dificultades para poder sostenerse ella y a su familia, para poder por ejemplo pagar el transporte, los alimentos, la educación, para tratar de sufragar los gastos básicos que se tienen para atender las necesidades, dejando de lado su propia salud, su educación, su bienestar.




Referencias bibliográficas:





[2] http://www.inegi.org.mx/prod_serv/contenidos/espanol/bvinegi/productos/integracion/sociodemografico/mujeresyhombres/2013/Myh_2013.pdf
[3] Idem, pág. 47.

miércoles, 3 de febrero de 2016

LAS ADOLESCENTES LAS MAS VULNERABLES EN INTERNET

URGENTE LA LEGISLACIÓN EN PROTECCIÓN DE DATOS PERSONALES
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
02 DE FEBRERO DEL 2016

Las y los jóvenes son la población más vulnerable en nuestro país esto a pesar de los esfuerzos que realizan las autoridades para llevarles asistencia y apoyo en materia de salud, de educación, de trabajo. Las jovencitas se han visto más desprotegidas porque lamentablemente la equidad y la igualdad aún están muy por debajo de lo señalado por la ONU Mujeres, y son más susceptibles de ser víctimas de diversos delitos, entre ellos los de carácter sexual, laboral y el clima de violencia generalizado en los diferentes contextos en los que nos desenvolvemos.

Para este 2016 el Día Internacional de las Mujeres maneja el tema “Por un Planeta 50-50: Demos paso para la igualdad de género”  [1] con ello se pretende abatir la inequidad con educación y sensibilización de los problemas que acarrea no estar en las mismas condiciones del hombre.

En un planeta Tierra con enormes desigualdades que están provocando brechas que parecen no juntarse, un punto que a destacar es la violencia que se está suscitando en el uso de las Nuevas tecnologías, en una buena parte se pretende que se utilicen para incrementar la educación, los procesos culturales que nos enriquecen como humanos, pero lo cierto es que se está utilizando el internet como una herramienta para incrementar la inequidad y la injusticia contra las mujeres.

El acceso a las tecnologías digitales  va en aumento para las y los jóvenes de nuestro país. En 2014 la población [2]  “(…) de los 12 a los 17 años, el 80% se declaró usuaria de Internet en el 2014. Entre los niños de 6 a 11 años, el acceso es igualmente significativo (42.2%) y es de esperar que crezca con rapidez.”
Conforme la población va incrementando su edad el uso de internet es menor, en el grupo de edades de 18 a 24 años dos de cada tres personas hombres o mujeres utilizan internet. Quienes más lo utilizan son las personas con estudios de nivel superior.

Dentro de los grupos que usan internet las y las jóvenes los emplean para enviar mensajes y tener comunicación, estar en contacto continuo con sus grupos de amigos, quizá con apenas estudios de nivel básico, primaria y secundaria, y lo hacen sin las previsiones necesarias para resguardar la privacidad de sus datos personales, tales como su nombre, su edad, su escolaridad, el nombre de la escuela a la que asiste, sus gustos, los regalos que le hacen, los sentimientos que tiene, sus malestares. Lo que lo hace fácilmente vulnerable a un ataque en la privacidad de su vida personal.

Las personas jóvenes acceden a internet a través de un smarphone, desde ahí y con la facilidad que ello implica, toma fotos, graba imágenes y las envía a sus amistades, sin detenerse a pensar en que otros aspectos de su vida va retratando.

Las jóvenes adolescentes se están enfrentando a problemas tales como robo de identidad para fines de lesionar sus sentimientos y su vida en general, además de ser víctimas de ciber bulling, sexteen, acoso, chantajes.

Además de que los ciberdepredadores las acechan hasta que las contactan en citas reales para enamorarlas y hacerlas víctimas de trata con fines de explotación laboral o sexual.

Para el FBI (Buró Federal de Investigación) investiga las imágenes inocentes que suben las adolescentes a las redes sociales para ir en busca del “viajero”[3] o ciberdepredador, sin embargo aseguran en su página de internet que va en aumento debido a que más adolescentes acceden a internet, pero también hay un aumento en el número de depredadores sexuales, porque en internet encuentra el ambiente ideal para detectar a las adolescentes vulnerables.

En México hablar de la policía cibernética es relativamente nuevo, en Jalisco se crea una unidad especializada en 2002, en San Luis Potosí es apenas en la administración pasada como se conformó dando seguimiento a las denuncias presentadas a través del teléfono de emergencia 066. El año pasado el Estado de México presentó ya su Ciberpolicia.

Lo más importante es la denuncia, para lo cual también se debe fortalecer el Código Penal en materia de tipificar como delito el robo de identidad con la intención de proteger los datos personales sobre todo de niñas, niños, las y los adolescentes que son la población con mayor riesgo de ser lastimada.



[2] http://www.inegi.org.mx/saladeprensa/aproposito/2015/internet0.pdf
[3] https://www.fbi.gov/espanol/historias/predadores-sexuales-van-tras-adolescentes-en-linea

lunes, 1 de febrero de 2016

BRECHA DIGITAL EN LAS MUJERES

BRECHA DIGITAL EN LAS MUJERES
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
26 DE ENERO DEL 2016

Las mujeres obtienen menos beneficios del acceso digital, esto se convierte en una brecha que debe subsanarse para evitar el incremento de las desigualdades entre las personas.

Las nuevas Tecnologías de la Información (TIC´s) podrían considerarse como un elemento crucial para favorecer el intercambio y flujo de información sin ningún tipo de discriminación, sin embargo la difusión de datos a través de internet y de todos los mecanismos que de ahí emergen (blogs, redes sociales, emails, etc.) no se lleva a cabo en un marco de igualdad y equidad, y en ello intervienen los procesos de una sociedad de consumo y de mercado, esto quiere decir que muchas personas especialmente mujeres, no cuentan con los recursos económicos suficientes para hacer frente a los cambios tecnológicos.

Es una de las brechas que se está gestando y que corresponde en una primera instancia resolver al Estado, y no puede solo limitarse al acceso de internet [1]  sino a los usos e intensidad de éste.  Hablar de una brecha digital se refiere a quienes sacan provecho de la cercanía con las TICs y quienes no lo pueden obtener por su condición social y económica.

No cabe duda que la brecha digital de género agravará las diferencias profesionales y laborales, en términos de salarios, estabilidad de empleo, entre otras, y además limita ya el desarrollo del comercio electrónico, retrasa las innovaciones en los servicios públicos (como darse de alta a servicios a través de internet). Si esta brecha se sabe manejar adecuadamente se reducirán, muchas de las desigualdades por las que han luchado durante décadas colectivos feministas.

Según la Organización de Naciones Unidas [2]  en América Latina en el periodo del 2001 al 2002 (hace una década) se registró un crecimiento de un 35 por ciento de usuarios de internet, es decir de 17.6 se pasó a 35.4 millones de cibernautas, y de este número el 35 por ciento son mujeres, de acuerdo con el estudio sobre Comercio Electrónico y Desarrollo de la ONU, la cifra era alta, pues en Europa apenas un 25 de los usuarios de internet son mujeres.

La Comisión de Ciencia y Tecnología para el desarrollo de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, órgano de la ONU, trató dos temas como prioritarios
  1. La ciencia, la tecnología y la innovación en apoyo de ciudades y comunidades periurbanas sostenibles.
  2. El acceso de banda ancha a Internet como medio de lograr una sociedad digital inclusiva.
Ya habían indicado “En su resolución 2012/5, el Consejo Económico y Social instó a todos los interesados a que "dieran prioridad al desarrollo de enfoques innovadores que promovieran el acceso universal a la infraestructura de banda ancha a un costo asequible para los países en desarrollo y el uso de los servicios de banda ancha pertinentes". [3]

Los grupos de mujeres que tienen acceso a internet están alfabetizadas y tienen un nivel de educación media y superior, además tienen poder adquisitivo para pagar la conexión ya sea en su hogar, en un cibercafé y ahora a través de su Smartphone.
En México y de acuerdo con datos sobre el número de usuarios y usuarias arroja que las mujeres representan el 49.3% y los hombres el 50.7 por ciento. Datos de la Asociación Mexicana de Internet, en el Estudio de Hábitos de los Usuarios de Internet en México 2015, hombre y mujeres tienen un uso muy similar, de edades que oscilan entre los 19 y los 34 años[4]  .

En México en abril del 2014 se registraron 47.4 millones de personas de entre seis años o más usuarias de internet, lo que significa el 44.4  de la población en el país, con una tasa de crecimiento del 12.5 porciento [5] .

Son apenas 13.5 millones de mujeres de las 57 millones que somos, las que emplean el internet principalmente para obtener información , para comunicarse, para la educación, la capacitación y, en cuarto orden para el entretenimiento, en porcentajes mínimos lo emplean para la banca electrónica o interactuar con el gobierno. 

Se debe buscar que los usos de internet estén relacionados con el terreno laboral, para que las mujeres tengan las mismas oportunidades en situaciones como la maternidad, ya que en muchos de los casos tienen que abandonar su actividad laboral durante los primeros meses de vida de su recién nacido.

Ya en 1988 Laura Tremosa escribía en su libro La Mujer ante el desafío Tecnológico[6] advertía de la importancia de las nueva Tecnologías en el campo laboral e intelectual de las mujeres. Ahora en pleno siglo XXI las TIC´s deben ser una vía para apoyo y defensa de los derechos de las mujeres para el acceso a nuevas oportunidades de estudios y de trabajo que no están disponibles en los medios de comunicación tradicionales.

Las nuevas tecnologías deben ser aprovechas para disminuir las diferencias entre hombres y mujeres, sin embargo el mundo virtual pareciera de pronto que es una extensión del mundo real, en cuanto a convertirse en una prolongación de las mismas injusticias históricas y desigualdades, y que especialmente son vulnerables mujeres e infantes. Pero las ventajas las debemos tener presentes para potencializar los usos del internet en provecho de abatir esas desigualdades.

El comienzo de ciberfeminismo de apoyo a través de la web a mujeres para educación, trabajo y conciencia política se dio a partir de 1993 en la Asociación para el Progreso de las Comunicaciones con la integración del grupo APC-Mujeres, en España, Australia e Inglaterra.

En México está la Asociación Mexicana de Mujeres Organizadas en Red (AMMOR) apoya a grupos de mujeres rurales y urbanas, que buscan la equidad e igualdad , de acuerdo con su página de internet agrupa a más de 200 organizaciones de mujeres de 15 estados del País. Esto nos brinda un panorama sobre la situación de las mujeres con respecto del uso de las nuevas tecnologías, a pesar de que los porcentajes de usuarios y usuarias son casi similares entre hombre y mujeres, el aprovechamiento que se hace aún no es significativo para su crecimiento educativo, cultural y laboral.





[1] http://www.mujeresenred.net/spip.php?article1567, consultado el 24de enero del 2016, La segunda brecha digital y las mujeres, Cecilia Castaño Collado.
[2] http://www.mujeresenred.net, Mujeres TIC y Transparencia, Valeria Vilardo, consultado el 10 de agosto del 2013
[3] http://unctad.org/es/Paginas/Home.aspx consultada el 13 de agosto del 2013.
[5] http://www.inegi.org.mx/saladeprensa/aproposito/2015/internet0.pdf  Consulta realizada el 25 de enero del 2016
[6] La mujer ante el desafío tecnológico, Laura Tremosa, Editorial Icaria. 8 de marzo en colaboración del Instituto de la Mujer, Ministerio de Cultura. ISBN: 84-7426-119-8 Barcelona - 1986

DERECHOS DE LAS VÍCTIMAS

DERECHOS DE LAS VÍCTIMAS
Colaboración para el programa A Detalle en Global Media
19 DE ENERO DEL 2016

Las personas en situación de víctimas han padecido una serie de eventos que lastiman y lesionan su integridad, modifican su vida, la visión que tienen de ella, han recorrido muchos caminos y tocado muchas puertas para que se les haga justicia, para que se les atienda en sus derechos como víctimas.

El camino que recorren debe ser lo más corto posible hacia el resarcimiento del daño que se les provocó, las autoridades tienen la obligación de evitar que en ese camino todavía tengan complicaciones, evitar que sean las propias autoridades quienes les hagan más difícil tener el acceso a la justicia.

Como personas defensoras de derechos humanos, como autoridades que atendemos a víctimas debemos tener muy claro que no se debe revictimizar, que no se debe revivir el hecho que le ha ocasionado un cambio difícil en su vida. Estamos en medio de una transición hacia el nuevo sistema de justicia penal en el que vislumbramos una mayor atención a la persona en condición de víctima. Ahora habrá abogados para que les acompañe y asesore durante todo el proceso.

En nuestro país la atención a la víctima es relativamente nuevo, hasta hace poco y aun todavía, las personas deben buscar su propia defensa y por malos procedimientos de la propia autoridad quien le cometió el agravió ni siquiera pisan una celda; lo que lastima a quien ha sufrido.

Los derechos de las víctimas están encaminados a favorecer todo el tiempo la protección de sus derechos.

Tiene derecho la persona en situación de víctima a una investigación pronta y eficaz que lleve a la identificación y enjuiciamiento de los responsables de las violaciones a sus derechos humanos. Tiene derecho a una reparación integral, que sea adecuada a cada persona, diferenciada, transformadora por supuesto efectiva. Tiene derecho a conocer la verdad de lo ocurrido acerca de los hechos en que fueron violados sus derechos humanos. [1]

Tiene derecho a que se le brinde protección y se le salvaguarde su vida y su integridad corporal.  A contar con un tratamiento especializado que le permita su rehabilitanción tanto física como emocional, que ello le permita reintegrarse a su proyecto de vida

Dentro de los derechos que tiene la persona en condición de víctima es a ser tratadas con humanidad y completo respeto a su dignidad y sus derechos humanos por parte por supuesto de servidores públicos, pero también con quienes les acompañan en la defensa de sus derechos, las personas que han vivido una situación de víctima no pueden ser revictimizadas, en la defensa de los derechos humanos no podemos violentarlas.

Tras vivir un hecho traumatizante que le ha transformado su vida la persona está vulnerable, susceptible de caer en nuevos hechos que sigan lastimando, por ello se le debe proporcionar la ayuda inmediata que requiera, la asistencia, la atención en forma oportuna, pero además rápida, equitativa y gratuita.

El Estado tiene una enorme deuda con las víctimas, en el trayecto para buscar la justicia se les violentan sus derechos humanos, por ello deben recibir también de manera gratuita atención psicológica y la seguridad en su entorno. Le debe apoyar para rehacer su proyecto de vida.



[1] Ley de víctimas para el estado de San Luis Potosí, decreto 776, Publicada en el periódico oficial el 07 de octubre del 2014.