martes, 29 de diciembre de 2020

EL FUTURO QUE QUEREMOS LAS MUJERES, por Gloria Serrato

EL FUTURO QUE QUEREMOS LAS MUJERES

Colaboración para Global Media

https://www.globalmedia.mx/articles/EL-FUTURO-QUE-QUEREMOS-LAS-MUJERES

29 DE DICIEMBRE 2020

 

El año 2021, es el tiempo que cambió al mundo, por fin comprendimos como humanidad que lo más importante es la salud, física y mental. Tantos siglos, y en este año que comenzará en breve hemos reparado que la violencia es innecesaria, que todas las personas podemos vivir en paz y con tranquilidad.

 

El 2021 será el año en el las exigencias de las mujeres se tradujeron en políticas públicas, en leyes nuevas, en sensibilidad de todas las personas, para que tengamos las mismas oportunidades en todos los ámbitos de la vida pública y privada. Los motivos para exigir desde la plaza pública, las redes sociales en internet, serán muy escasos porque las autoridades ya trabajan de manera contundente en eliminar todas las formas de discriminación.

Todo el trabajo realizado tiempo atrás, para lograr la sensibilidad sobre nuestras dificultades, es una realidad en todas las personas, sobre todo en los hombres, en las personas servidoras públicas, en quienes se empeñaban en vernos diferentes.

2021 será el año en el que las distinciones se borran, las mujeres, no tenemos más que exigir cuotas de género en los espacios públicos, los derechos sociales, civiles y políticos, por fin son asumidos sin distinción de sexo, ni de género, ni de orientación, ni de nada. Por fin llega ese día, en el que hemos ansiado muchas personas, en el que las diferencias por nuestra condición de género no son importantes para estar en puestos de toma de decisiones.

Las relaciones de pareja, son relaciones equitativas justas y amorosas, la violencia no tiene cabida. Las relaciones humanas se han emparejado tanto, que las medidas afirmativas que se implementaron como estrategias de política pública, no son necesarias, hemos asumido como sociedad la igualdad plena, la igualdad sustantiva, la igualdad real. La igualdad.

Las políticas públicas, por fin, tienen un aterrizaje completo para subsanar las necesidades que tenemos nosotras, habrán estrategias concretas, los hombres las ven como algo natural, y nos apoyamos unas con otros, y otras con unos, alcanzamos las metas y los sueños, como profesionistas, como personas, como seres humanos.

¡Parece un sueño!.

Espero que al despertarnos el primero de enero de 2021, la mayor parte de estos comentarios, sean puestos en práctica para que se hagan realidad. Para que algo se cumpla, no sólo hay que decirlo, hay que hacerlo, hay que trabajar cada día para alcanzar la igualdad.

Según los cálculos de la ONU Mujeres nos faltan más de 50 años para alcanzar la igualdad entre hombre y mujeres, que eliminen las brechas entre las personas, pero cada día, todas las personas podemos aportar un poco, basta con tener un poco de sensibilidad y perspectiva de género.

La igualdad, no puede ni debe ser un sueño!

Para que estos anhelos, no sean solamente algo lejano, que no se puede alcanzar, que no se puede realizar, es necesario primero identificar que las diferencias no deben generar desigualdades. Segundo,  que cada persona podemos trabajar en eliminar actitudes violentas hacia las mujeres, que cada servidor público aplique sus protocolos de igualdad en cada una de sus actividades.

La reeducación, es sin duda el mejor antídoto contra la discriminación y el machismo, es una vacuna para todos los males, entre ellos para la erradicación de la violencia hacia todas personas, pero principalmente hacia las mujeres. ¿Cuántas generaciones nos tomará enseñarnos que las distinciones no tienen que crear brechas de desigualdad?. Seguiremos exigiendo nuestros derechos hasta que sean realizables.

Porque no queremos que haya más mujeres víctimas de violencia familiar, ni de violencia feminicida.

No quiero estar soñando.

Hemos hablado en este espacio, de los hechos tan dolorosos que muchas mujeres viven cada día, a consecuencia de la violencia que ejercen hombres.

Estas semanas, a lo largo del año que está por acabar, he tratado en cada una de mis palabras, sensibilizar de la urgente necesidad de que hombres y mujeres nos veamos como iguales. No queremos que más mujeres mueran a consecuencia de la violencia feminicida, no queremos que más mujeres vivan con trastornos psiquiátricos y psicológicos a consecuencia de la violencia familiar, no queremos mujeres que se sientan minimizadas por querer espacios en el ámbito público. Queremos una sociedad justa.

miércoles, 23 de diciembre de 2020

SITUACIÓN DE LA VIOLENCIA VS LAS MUJERES, por Gloria Serrato

 SITUACIÓN DE LA VIOLENCIA VS LAS MUJERES

Colaboración para Global Media

https://www.globalmedia.mx/articles/SITUACIÓN-DE-LA-VIOLENCIA-VS-LAS-MUJERES

23 DE DICIEMBRE 2020

 

Estamos a punto de cerrar un año, ha sido complejo en materia de salud, con muchas dificultades para los grupos vulnerables, y como consecuencia también para otras áreas, como son la economía, la educación, la seguridad. Y en lo que cada semana, desde esta columna revisamos y comentamos: lo relacionado con las mujeres y las violencias que viven. El confinamiento derivado de la pandemia provocó que aumentaran los casos de violencia física, económica, psicológica, contra mujeres y niñas.

Este año hemos comentado con ustedes las diferentes formas de violencia contra mujeres, e investigamos cómo las circunstancias de salud, desafortunadamente tuvieron repercusiones en maltrato a niñas, mujeres adultas y mujeres ancianas.

La violencia sigue estando presente en la vida cotidiana de nosotras, es imprescindible que no nos acostumbremos a ella, que cuando se conoce que una mujer es víctima, tengamos información de cómo apoyarla, y seguir exigiendo al Estado, que se cuenten con todos los mecanismos, para que pueda denunciar y alcanzar la justicia, en el menor tiempo posible.

Decirlo es sencillo, pero para una víctima, es muy complejo poder tomar decisiones, sobre todo, denunciar a la persona que la agrede, porque había vínculos que la mantenían unida al agresor, la familia, los hijos, el amor, la cuestión económica, la casa, entre otros aspectos. En los últimos días de este año, nos gustaría que la violencia frenara, que no ocurriera ningún acto que llevara a privar de la vida a una mujer.

El encierro originado por la pandemia, ocasionó que muchas parejas tuvieran más dificultades que las que cotidianamente tenían, entendiendo por dificultades, circunstancias que se tiene por las propias relaciones de pareja, sostener un hogar, encargarse de su cuidado, de su manutención, incluso de la limpieza, del orden, cuidado y responsabilidad de hijos e hijas. Vivir en pareja no es nada fácil, si a eso se le suman, los procesos culturales con que son educadas las personas, principalmente los hombres, esas dificultades de pareja, se convierten en actos de violencia machista, por lo que en esta pandemia miles de mujeres vivieron estas desventajas y con mucho más violencia.

Cerramos un año con más de 6 mil denuncias presentadas por violencia cometidas hacia las mujeres en razón del género, se registró un aumento en los casos de violencia y agresión sexual cometidos a mujeres de todas las edades. Aumentando la modalidad para cometer los delitos a través de medios cibernéticos, siendo las niñas y las adolescentes, las más afectadas.

Hay varios retos que tenemos para el 2021, los proponemos en dos grandes ejes:

A) Uno le corresponde a cada una de las personas, auto cuidarnos, ser personas solidarias para siempre apoyar a una mujer que pide ayuda, el otro gran eje,

B) le corresponde al estado, diseñar estrategias puntuales sobre la erradicación de la violencia contra las mujeres y una es acciones para el cambio de mentalidades con respecto de la relaciones entre hombres y mujeres.

El tamaño de la violencia nos muestra también, el tamaño de las políticas públicas diseñadas, porque constatamos que son inoperantes.

Diseñar estrategias claras, concretas y con la intención de si abonar a la erradicación de la violencia contra las mujeres, no es solamente sentarse a discutir lo más adecuado para las mujeres, es diseñar tácticas que estén orientadas hacia reducir los machismos que han sido más violentos.

Ese es el tamaño del reto que tienen las autoridades, y quienes se postulan para puestos de elección popular, exhortarles a que no utilicen el combate a la violencia contra las mujeres, como un tema de sus agendas políticas.

A quienes en enero se postulan como candidatos o candidatas, les corresponderá revisar las estrategias diseñadas e implementadas por la administración estatal o municipal actual, analizar el destino correcto de los recursos para disminuir las desigualdades entre hombres y mujeres, y todas y cada una de las acciones orientadas a reducir los altos niveles de violencia contra las mujeres.

Hace algunos años, el gobernador actual se sumó a la petición de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, para solicitar a la Secretaría de Gobernación, que en San Luis Potosí se implementara la alerta de violencia de género, parecía una buena práctica, que lo hiciera. Pero al cabo de los años, a punto de dejar el gobierno, el número de mujeres asesinadas y maltratadas, aumentaron.

Se han diseñado varias estrategias que son de carácter comunicacional, que son a largo plazo, pero que hoy por hoy, no ha reducido la violencia machista, ni la violencia feminida.

martes, 8 de diciembre de 2020

MUJERES MAYORES Y ABANDONO, por Gloria Serrato

 MUJERES MAYORES Y ABANDONO

Colaboración para Global Media

https://www.globalmedia.mx/articles/Mujeres-mayores-y-abandono

08 DE DICIEMBRE 2020

Estamos en apunto de concluir un año complejo, difícil para la salud física y mental de las personas en general, y particularmente de niñas y mujeres.

Las dificultades que enfrentaron las mujeres fueron, entre otras, la violencia, las triples jornadas laborales, trabajo fuera de casa, trabajo doméstico y acompañamiento en clases virtuales para sus hijos e hijas.

Hay otro grupo de mujeres, que tienen mayores desventajas, son las que tienen algún tipo de trastorno psiquiátrico y de edades avanzadas; en muchos de los casos son abandonadas por sus familias, quedando en la completa indefensión. En sus relatos, éstas mujeres afirman haber sido víctimas de violencia a manos de sus parejas, y ahora viven violencia de parte de hijos e hijas, quedando en el desamparo y viviendo en situación de calle.

La situación de violencia contra las mujeres de edad mayor, en sus modalidades de abandono y omisión de cuidados, es un hecho alarmante, es trágicamente común, y con mayor preponderancia, las que tienen algún trastorno psiquiátrico.

De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud [1] el 15 por ciento de las personas adultas de más de 60 años o mayores, sufren de algún tipo de trastorno mental. Los datos son alarmantes porque para el año 2050 habrá más de 2 mil millones de personas en esos rangos de edad, por eso es crucial que mantengamos una salud física y emocional sana.

Los trastornos psiquiátrico en muchas mujeres, es la secuela de la violencia familiar, que vivieron durante muchos años; por lo que pueden presentar estrés, ansiedad, depresión. Por supuesto que hay algunas otras mujeres que tienen trastornos fisiológicos, que repuntaron en una etapa de su edad madura.

Las mujeres entre los 50 y los 70 años de edad, que viven trastornos psiquiátricos, o alguna enfermedad psicológica severa, derivada del estrés postraumático a consecuencia de la violencia familiar, la afectación en mujeres de estos rangos de edades, tienen un impacto que repercute en una vejez de soledad y abandono.

Es importante que las mujeres tengan la atención debida en esta etapa de la vida, tanto en materia de salud, como de alimentación, de justicia, para aquellas que padecieron violencia a manos de sus parejas.  Las enfermedades mentales también se presentan con otras enfermedades, por ejemplo una mujer que presenta diabetes, hipertensión, puede producir ansiedad o depresión. Muchas terminan siendo abandonadas en hospitales, en asilos o bien en casas, en donde son cuidadas  atendidas por personas que realizan actividades domésticas.

¿Qué podemos hacer en beneficio de las mujeres que están en ese tipo de condiciones? Como sociedad en general, debemos cambiar nuestra forma de ver la violencia familiar que viven los otros, prestarles ayuda, apoyo y no minimizar los hechos cuando con personas adultas mayores. Muchas mujeres de edad madura vivieron durante su etapa de juventud actos de violencia física, psicológica, económica, patrimonial, y que llegaron a normalizar de una u otra manera, lo que les generó un colapso emocional, en edades adultas.

A esto le agregamos que las mujeres, generalmente anteponen su salud a la de su familia, y no hay detección de enfermedades en sus fases iniciales, sobretodo problemas de tiroides, que se puede confundirse con depresión, cansancio,  de estrés, y demencia.

En sus etapas de mujeres adultas maduras, que llegaron a tomar una decisión para separarse de sus parejas, vive en el abandono, la violencia y reproche de hijos e hijas.

Debe atenderse esta situación con acciones preventivas de autocuidado, evitar el maltrato psicológico, económico.



[1] La salud mental y los adultos mayores, enlace recuperado  en https://www.who.int/es