MUJERES Y POLÍTICA EN ESTE 2021, por Gloria Serrato

MUJERES Y POLÍTICA EN ESTE 2021

Colaboración para Global Media : https://www.globalmedia.mx/articles/Mujeres-y-política-en-el-2021

13 DE ENERO 2021

La participación de las mujeres en la vida pública, específicamente en las actividades de carácter político, en elecciones para ocupar puestos de representación popular, había sido limitada; con el tiempo y las muy diversas presiones que se ejercieron a lo largo de la historia, por diferentes grupos de mujeres, se lograron modificaciones sustanciales a la ley, lo que abrió oportunidades en los espacios de toma de decisiones.

En el país se renovarán congresos locales, alcaldías, gubernaturas, lo que genera que el clima de convivencia entre las personas se hará denso, las elecciones siempre generan enconos y divisiones entre las personas, por las simpatías y orientaciones electorales. Los partidos políticos, tienen ahora la obligación, de alcanzar la paridad en las personas que postularán. Este sólo hecho no garantiza, que haya más mujeres en los cargos que se ofertan, pero si es una acción de equidad para salvaguardar los derechos de las mujeres.

Los partidos políticos están siguiendo una estrategia de cumplir con los requisitos que establecen las autoridades electorales, sin embargo, es difícil que en el tema de la paridad, lo hagan por un genuino reconocimiento de los derechos políticos de las mujeres. Están buscando mujeres para llenar las exigencias, y esto ha causado una ola de inconformidades, que reflejan el escaso avance de la sensibilización de los hombres que están tomando las decisiones sobre las postulaciones.

Los partidos conservadores, mantienen como estrategia, postular a mujeres a los cargos de diputaciones locales, a las alcaldías con escasa densidad poblacional,  y como candidatas a gobernadoras sólo en aquellas entidades que no tienen mayoría.

Debemos observar con detenimiento, las acciones que realizarán los partidos políticos, porque a pesar de que los mecanismos legales son claros, se reúsan a aceptar a las mujeres como compañeras políticas.

En San Luis Potosí, las decisiones locales para la contienda de gobernador se están definiendo. Los partidos políticos siguen sus viejas prácticas, con un velo de transparencia, que pone en dudas la legitimidad de sus contendientes. De este modo el Partido Acción Nacional, tiene candidato, obligando a la posibilidad femenina a declinar. El Partido Revolucionario Institucional, orilló a las probables mencionadas como candidatas, a emitir mensajes en redes sociales para aclarar, “que no tenían aspiraciones de candidatura para la elección de gobernador”.

El Partido Verde Ecologista ha tenido candidato desde el año pasado, y el PRD busca una alianza con el PRI.

Morena, decidirá en la segunda quincena de enero, quién será su candidata, y abre el halo de intriga, al ampliar su periodo para registro de aspirantes. Que hasta ahora había tres registradas. Pero también, desvía la atención de inconformidad, que presentaron los aspirantes varones inscritos. La dirigencia nacional, coloca a las mujeres mencionadas como aspirantes, a enraizar una confrontación entre ellas, mencionando a una cuarta solicitante, no registrada en los plazos inicialmente señalados.

La serie de decisiones, tomadas al criterio de quien dirige un partido político, más que valorar la participación de las mujeres, las deja en el centro de un conflicto y desafana a los candidatos, que siguen un procedimiento en el Tribunal Electoral, por las contradicciones en sus procedimientos internos de selección.

De las mujeres que se registraron hasta ahora, la Lic. Francisca Reséndiz Lara, ex dirigente del Sindicato De Trabajadoras y Trabajadores del Gobierno del Estado, ha sido una mujer que sin autoproclamarse como política, lo ha sido; alcanzó transformaciones en la administración pública. Y sin siquiera promoverse, es una persona que conoce a la perfección el manejo de la administración pública.

Ha sido una dirigente que sabe negociar, y que está del lado de las personas que más lo necesitan.

Hay rumores en los medios de comunicación, de una cuarta postulante, la Doctora Liliana Rangel, que no fue considerada por el PRI, para ser su candidata; ha tenido los reflectores mediáticos, por su copy de la estrategia nacional de informar diariamente sobre la pandemia del COVID. Dejando atrás una serie de observaciones públicas sobre desvió de recursos y malos manejos, que se han hecho sobre su trabajo como Secretaria de Salud y funcionaria pública de los gobiernos priistas.

A Reséndiz Lara, la conocí siendo yo reportera, veía con muy buenos ojos el movimiento que emprendió junto con otras personas trabajadoras, para formar un sindicato independiente del gobierno del Estado. En esos años, los gobernadores la veían como una amenaza. Sin decirse feminista, Francisca lo es, no solamente se trata de la nominación que hizo a ese sindicato, sino a su participación en la vida pública, llevando casos de trabajadoras que habían sido violentadas por su condición de ser mujeres.

Es importante revisar la trayectoria de cada una de las precandidatas, tanto las registradas, como las que han movilizado rumores, es significativo que sea mujer la candidata; pero es importante la trayectoria, el reconocimiento de la población; MORENA, debe regresar al origen, a lo que espera la gente, que es la honestidad de quien gobernará, que actué con transparencia, con el gasto correcto del recurso público, con la eliminación del amiguismo y el compadrazgo.

Los vuelcos en política, pueden dejar un amargo sabor para quienes durante mucho tiempo, nos han dicho como se tienen que hacer las cosas. No solamente es una cuestión de feminismo, sino de exigencia, de que se ponga al perfil que tenga el temple necesario para enfrentar un esquema misógino de políticos, que no están acostumbrados a tener contrincantes mujeres

Lenore Walker, psicóloga norteamericana, que identificó el círculo de la violencia, que ha estudiado a muchas mujeres que han vivido violencia extrema, ha dicho que, a las mujeres que participan en política, las han orillado a sacar un perfil más masculino, porque ese ámbito, sigue siendo muy difícil para las mujeres que quiere estar ahí. Los ejemplos que dio fueron el de Hillary Clinton y Margaret Thatcher, que desde la perspectiva de muchas feministas, no son el ejemplo a seguir, pero para esta experta en violencia contra las mujeres, es una manera de estar presentes.